Estrías: Top 10 Mitos desmentidos

Mitos sobre las estrías:

Las estrías, son lesiones suaves y blancas como cicatrices que por lo general se producen debido a un rápido estiramiento de la piel.

Repetidas veces, se desarrollan durante el embarazo, rápido aumento de peso o pérdida, y en la juventud.

Varios conceptos erróneos comunes sobre las estrías, hacen que sea difícil obtener una mejor comprensión de este problema estético.

Por lo tanto, es mejor estar informada con el conocimiento correcto, para hacer frente a este problema de manera adecuada.

Aquí están los 10 mitos sobre las estrías:

Mito # 1: 

Las estrías se forman únicamente en las mujeres.

Realidad : Las estrías son un efecto natural del embarazo y por lo tanto se cree que se producen sólo en las mujeres.

Alrededor del 90% de las mujeres tienen estrías durante el embarazo, sobre todo después del sexto o séptimo mes.

Sin embargo, las estrías se producen en los hombres, también.

Básicamente, las estrías aparecen cuando las fibras de elastina, se rompen debajo de la piel debido al estiramiento rápido en un corto período de tiempo. 

Así, además de embarazo, las estrías también pueden aparecer debido al aumento de peso o pérdida rápida y brotes de crecimiento durante la pubertad.

Mito # 2: 

Las estrías son causadas únicamente por el estiramiento de la piel.

Hecho : El estiramiento de la piel es la razón más común y obvia para el desarrollo de las estrías, pero no es la única causa. La capa de la dermis de la piel es fuerte y tiene un buen material de apoyo y protección.

Sin embargo, los factores hormonales tienden a prevenir o disminuir la formación de las fibras de elastina y de colágeno en la dermis. 

Esto reduce la capacidad de la piel para resistir la fuerza de estiramiento rápido, que a su vez hace más susceptible a desarrollar estrías.

Esto sucede generalmente debido a los niveles elevados de glucocorticoides y otras hormonas. La glándula suprarrenal aumenta la producción de esta hormona durante el embarazo, la pubertad, el culturismo y rápido aumento de peso o pérdida.

Mito # 3:

Las estrías ocurren solamente en el estómago.

Realidad : Aunque el estómago es la localización más frecuente para las estrías, sobre todo a causa del embarazo, también pueden aparecer en otras partes del cuerpo, como los senos, muslos, pantorrillas, glúteos, espalda baja, brazos, el codo y pliegues de las rodillas.

Mito # 4: 

Bajar de peso le ayudará a deshacerse de las estrías.

Realidad : El hecho de que el aumento de peso y la obesidad causan las estrías no significa que puedan ser eliminadas a través de la pérdida de peso.

Bajar de peso no le ayudará a deshacerse de las estrías, ya que son, básicamente, las cicatrices en la capa dermis de la piel.

Por otra parte, son causadas por el adelgazamiento y estiramiento excesivo de la capa media de la piel y la pérdida de peso, no le ayudará a volver a la normalidad.

No obstante, el ejercicio puede ser de alguna ayuda cuando las estrías son frescas (es decir, que son de color rojo o rosado).

Mito # 5: 

Las personas delgadas no pueden tener estrías.

Realidad : Esto no es cierto porque las estrías a menudo se desarrollan debido a factores hormonales y genéticos. Los pre-adolescentes y los adolescentes, por ejemplo, pueden tener estrías debido a los cambios hormonales, independientemente de su peso.

Aunque, ciertas condiciones de salud poco frecuentes como el síndrome de Marfan, síndrome de Cushing, y el uso prolongado de corticosteroides tópicos también pueden causar este problema.

Mito # 6: 

Las estrías no cambian de color .

Realidad : Las estrías aparecen inicialmente como líneas de color marrón rojizo, o rosa.
Esto es en realidad, es el color de los vasos sanguíneos que se muestran a través de la rotura de la dermis (la capa media de la piel).

Poco a poco, como los vasos sanguíneos se contraen, las vetas rojizas se vuelven líneas de color blanco o plateado, debido a la grasa de color pálido debajo de la piel.

Incluso pueden desaparecer con el tiempo. Además, el color de las estrías también depende de su tono de piel.

Mito # 7:

El bronceado elimina las estrías .

Realidad : El bronceado sólo cubre hasta las estrías. Esto no las elimina. En algunos casos, incluso puede hacer que las estrías aparezcan peor, sobre todo las que son de color blanco.

Las de color blanco plateado y las estrías coloreadas maduras, se vuelven más visibles después del bronceado ya que oscurece la piel circundante, pero no las estrías, que son básicamente las cicatrices y el tejido cicatrizado que no se broncea.

Mito # 8: 

El seguro médico cubre los tratamientos para las estrías.

Realidad : Las estrías son un problema estético y no suponen riesgos para la salud, incluso si son muchas. Por lo tanto, los tratamientos para las estrías, como la cirugía láser, la microdermabrasión y otros procedimientos cosméticos, no suelen ser cubiertos por el seguro médico.

Mito # 9: 

Las estrías se pueden eliminar por completo.

Realidad : Aunque las estrías pueden desaparecer y aligerarse con ciertos tratamientos y medidas correctivas, no pueden ser eliminadas por completo, no importa qué tan caro pueda ser el tratamiento.

A pesar de la terapia con láser, no se pueden eliminar completamente estas marcas, pero puede reducir significativamente su apariencia. 

En casos raros, las estrías por debajo del ombligo pueden desaparecer por completo cuando la abdominoplastia (una abdominoplastia) se realiza para eliminar el exceso de piel y grasa del abdomen.

Mito # 10:

Beber suficiente agua y comer una buena dieta no tiene efecto sobre las estrías.

Realidad : Beber ocho a 10 vasos de agua al día y comer una dieta saludable puede ayudar a prevenir que las estrías que produzcan.

Una hidratación adecuada es buena para la piel, ya que mejora la elasticidad de la piel. Además, una dieta nutritiva rica en proteínas, zinc y vitamina C facilita el rejuvenecimiento de la piel y promueve la producción de colágeno que mantiene la piel firme. 

Sin embargo, estas medidas no garantizan la inmunidad completa de las estrías, especialmente si usted tiene una predisposición genética a desarrollar este problema.